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poupée de cire

encorsetadas

encorsetadas Dicen que Nicole Kidman se fracturó una costilla con un corsé durante el rodaje de "Moulin Rouge".
Hoy los corsés ya no se llevan y, de hecho, la anécdota de la Kidman (bueno, anécdota para nosotros, no creo que a ella le hiciera mucha gracia) es la que más nos puede ayudar a hacernos una idea del sufrimiento que suponía estar bella en aquella época.
Pero esos corsés que antaño se clababan en el cuerpo femenino para conseguir unas cinturas anatómicamente imposibles de tener hoy son totalmente distintos. Han adoptado la forma de patologías alimentarias que cada vez, por suerte, son más conocidas en la sociedad.
La emperatriz Sisi de Austria medía 172 centímetros, nunca superó los 50 quilos y su cintura de 49 centímetros (¡49!) era célebre en Europa. Si la lejendaria Sisi viviera ahora se le diagnosticaría rápidamente anorexia.

El otro día leí un artículo que me hizo estremecer: las anoréxicas y las bulímicas, como si de una religión se tratara se autodenominan "anas" y "mías", y se distinguen entre ellas por llevar brazaletes de distinto color según padezcan una u otra enfermedad. En la red hay centenares de páginas que ellas mismas han escrito para animarse unas a otras a seguir con esas "dietas" que las llevarán a una vida mejor, a su entender. Quieren llegar a la perfección, aunque esto suponga pasar antes por la muerte.

Me anima un poco pensar que estas enfermedades están cada vez más interiorizadas en la consciencia de la gente. Pero queda mucho por hacer, la verdad. Tengo la sensación que se ve a estas chicas (las hay muy jóvenes, sí, pero las hay que no tanto) como unas caprichosas. Es decir, creo que mucha gente no ve el peligro de estas patologías, sino que les parecen caprichos de niña. Y no es así.

Mientras sigan siendo invisibles a ojos de la sociedad seguirá habiendo enfermas. No quiero echar la culpa, como siempre se hace, a la publicidad y al cine. Sí, de acuerdo, ellos tienen parte de la culpa, pero no toda. Mientras siga habiendo madres que ponen a dieta a niñas de 5 años, esto seguirá ocurriendo.

5 comentarios

marquinho -

En el que em donaràs la raó és en què les enfermetats mentals de què estem parlant estan sobretot pel món (de la publicitat, del cine, del com hauriem de ser tots i totes, i de pensar: agradaré tal com sóc??? Òbviament, el què comença sent un problema causat pel món (això crec), acaba sent un problema que ens creem, que interioritzem i ens pot portar a aquestes malalties mentals.

maria -

per a marquinho: l'autoestima humiliada no és la conseqüència de la feina no donada o la mirada no creuada o la talla no trobada (impossible en rebaixes, per cert). Tot això ajuda, però no ens enganyem: decepcions en tenim tots en aquesta vida, i no per això hem de donar la culpa al món de la nostra baixa autostima´o autocompassió. La Mia i l'Ana (per cert, ana, quina casualitat, quins collons i quina mala sort de nom) són enfermetats MENTALS, igual que una depressió a la que tots som susceptibles de caure i ningú sap exactament PER QUÈ, i la culpa no la té el món, repeteixo, que si no ja ens hauríem tirat tots pel balcó.

marquinho -

La culpa la tenim tots. En: la mirada no creuada, la conversa no parlada, la feina no donada, la talla no trobada, l'amistat negada. Al final què passa: l'autoestima humiliada.

Enfermetats del món opulent.

holly -

No era mi intención poner la culpa sólo a las madres. Estoy muy contenta con la mía. Aún así, sabes (y si no lo sabes telo digo ahora) que tengo un complejo así de grande. Pero no se puede culpar sólo a los medios de comunicación. Que sí, que gran parte de la culpa la tienen ellos, puesto que en el fondo son mensajeros y los que han ayudado a difundir los cánones de belleza actuales. Pero ya se los ha acusado bastante. Puede que sea el momento de hacer algo, ¿no?
Conozco el tema de las patologías alimentarias de cerca y sé que el entorno es muy importante (léase familiares y amigos/as, sobretodo -as). Las comparaciones pueden llegar a ser odiosas...

nelo -

Mmm, Nicole Kidman, Moulin Rouge, "Come what may"...me encanta. Nunca la rotura de una costilla valió tanto la pena. Gran film!
Trabajar en un cole te permite ver el proceso de evolución de las mias y las anas. Las madres y sus dietas representan un 0.1 % del problema holly. Créeme. El resto son medios de comunicación, falta de consejo en la etapa de crecimiento y la referencia de las amigas, sobretodo. Aquellas que visten de una manera o de otra y que con cualquier trapito estan monísimas.